Un piercing en el corazón

Los sueños, un tema la mar de interesante, yo soy de las que creen que nos pueden contar mucho acerca de cómo nos sentimos, de lo que queremos, odiamos, nuestros deseos, nuestro anhelos, (del consciente y del subconsciente)...los sueños son símbolos interesantísimos. ¿Qué quieren que les diga? ¡Me encanta analizar un sueño enigmático!
Ayer soñé que un chico, no recuerdo su rostro, ni casi nada de él, sólo que llevaba una camiseta a rayas, el asunto y curiosísimo...es que yo podía ver a través de su cuerpo y él tenía un piercing en el corazón. Lo decía y le gustaba...yo lo veía...y como sucede siempre en los sueños, me parecía lo más normal del mundo. Recuerdo vivamente la imágen: un corazón (no como el de arriba, sino de verdad...el órgano sangriento) con un piercing pequeñito...una perla plateada. No sé qué puede significar, si alguien tiene alguna idea. :D

Diez razones para amarte

Me encanta esta canción y Heath está tan dulce...
Espero que la disfruten. :D
You're just too good to be true
Can't take my eyes off of you
You'd be like heaven to touch
I wanna hold you so much
At long last love has arrived
And i thank god i'm alive
You're just too good to be true
Can't take my eyes off of you
Pardon the way that i stare
There's nothing else to compare
The sight of you leaves me weak
There are no words left to speak
So if you feel like i feel
Please let me know that it's real
You're just too good to be true
Can't take my eyes off of you
I love you baby and if it's quite all right
I need you baby to warm the lonely nights
I love you baby, trust in me when i say
Oh pretty baby, don't bring me down i pray
Oh pretty baby, now that i've found you stay
And let me love you baby, let me love you

Primavera en una isla del Mediterráneo

Mientras los almendros pierden sus flores,
los primeros brotes de las higueras van naciendo
y las amapolas tiñen de pasion los campos...
yo estoy aqui
y tú sigues lejos.
Cuenta una voz llena de primavera.
Nos empieza a llegar su aroma, ya empieza a cantar el corazón, en una isla más que en otra... en ciertos versos y su canción. La mía sigue siendo triste, su perfume no trae sabor, tardaré un poco en embriagarme, paciente espero su sensación.

Semana de película

Ayer vi "Seducción a la carta" y "Ellas y ellos" en la entrada anterior hablaba de revelaciones y certezas, pues la segunda peli fue la que lanzó esa flecha que mencionaba.
El miércoles vi "Diez razones para odiarte". Ya la había visto hace tiempo, pero me apetecía volver a verla para recordar un poquito a Heath.
Esta semana, después del trabajo me deleité con dos capítulos de "Mujeres desesperadas" y "House" respectivamente. ¡Cuánto hay que esperar por cada capítulo! Ya ahondaré en ellas más adelante. Nada como House.

Reloj deten tu camino

A veces las certezas te asaltan cuando menos las esperas y a veces te sorprendes por lo que pueden transmitirte, por lo que puedan revelarte.
Vives conciente de lo que tienes, no obstante, a veces quieres más, algunos somos insaciables, vivimos anhelando, soñando y el mejor sueño es el que estamos teniendo mientras estamos despiertos, sin embargo no nos damos cuenta. Hasta que un día lo haces...y piensas...¿Es que necesitaba de una cosa así para apreciarlo? Es raro, porque no es que no hayas sabido, claro que sabías, pero de pronto, como una flecha rápida te clava... directo al subcosciente y al consciente, a tu yo entero y todo es más cierto que nunca. Más nítido. ¡Lo sabes mejor que nunca!
Miramos al futuro esperando que pasen los días rapidamente, siempre esperando algo...ese algo esta en un futuro cercano, ya sea el fin de semana, las próximas vacaciones, etc. ¿Por qué no podremos vivir el presente con la misma intensidad con la que anhehamos el futuro? Yo siempre he sido pro "carpe diem" pero desde que he comenzado mi nuevo empleo sólo cuento los días para el fin de semana y no me gusta...no me gusta nada.
La vida es demasiado corta como para desear que el tiempo pase rápido.
Habrá que pasar por esta etapa de acostumbramiento para ver cómo me ajusto a mis nuevas circunstancias, si cuando pase un poco más de tiempo el estrés se desvanece y puedo volver a disfrutar de cada día no contando las horas para que sea más tarde o mañana.

"No puedo permitirme el lujo de la desesperación"

...dice David Grossman. Me gusta mucho leer la sección La Contra de La Vanguardia, pero, por alguna razón, no lo hago a diario, va por fases. A veces pasa mucho tiempo hasta que, de pronto, recuerdo que me aporta muchísimo leer esas entrevistas y busco la página y vuelvo a leer.
A veces me siento abatida, comenzar en un ambiente laboral radicalmente distinto a lo que estabas acostumbrado puede hundirte y si no eres capaz de infundirte cada día, cada hora, nuevos ánimos, si no te repites siempre que puedas, todo va a salir bien, tú puedes con ello, es sólo una sensación pasajera, no puedes seguir adelante más pronto que tarde tirarías la toalla. Los mandarías de paseo. Pero es tu prueba no la suya y será tu premio, tu logro, tu conocimiento profundo. Te vayas o te quedes.
No estoy acostumbrada a no tener éxito en lo que hago, siempre han valorado mi trabajo, he sido de las mejores, pero no puedo decir lo mismo de donde estoy ahora. Una empresa americana en la que te dan vacas grandes o pequeñas según tu rendimiento del día anterior. La más grande si has vendido más, la más pequeña si has sido la peor. No me parece un sistema muy acertado, por lo menos no para mi forma de ser, porque al darme una mini vaca lo único que consiguen es desmotivarme y frustrarme, si lo que pretenden alcanzar es lo contrario, conmigo no funciona en absoluto. ¿Me pregunto si funcionará con los demás? Imagino que con los menos orgullosos, quizás con los más dóciles. No es mi caso.
Lo de las vaquitas comenzó ayer y me afectó muchísimo, tuve que ocuparme de mis luchas internas durante casi toda la tarde y parte de la noche. Hoy me ha afectado un poco menos, lo que está claro es que si quiero seguir, no puedo dejar que me afecte tanto, porque sino, acabaré cabizbaja y me perseguirán pensamientos negativos y éstos me pasarán factura en mi rutina laboral. Porque si tienes pensamientos negativos, también te suceden cosas malas. Es una verdad universalmente reconocida, lo he comprobado, lo compruebo desde hace un mes cada día.
Leer hoy esta entrevista de la vanguardia: http://www.lavanguardia.es/lacontra/lacontra.html me ha dado un poco de paz, alegría y fuerza para luchar, más fuerza, porque, de por sí, soy una persona que no se da por vencida tan pronto, pero mi orgullo no es muy buen aliado. Tendre que aprender a tragármelo, a digerirlo de forma distinta, a transformarlo. Quizá, como dice mi madre, la vida no me ha golpeado aún lo suficiente en el ámbito laboral, yo sí que siento que sufro, no sé si es suficiente, pero sí que tragó y soporto cosas y me duele, pero saco fuerzas de ese optimismo natural de mi forma de ser. Me pondré un post it con esa frase muy cerca, para no olvidar nunca.
La entrevista no tiene desperdicio, los comentarios que hace sobre el heroísmo en la familia me han impactado y he sacado mucho de sus palabras.
Acabo de volver a leer la entrevista y...he cambiado la frase...en realidad es: "No quiero permitirme el lujo de la desesperación" ahora no sé cuál me gusta más...dependerá de la situación...en fin, así tiene un toque personal. :D

Fecha límite de un sueño

Caminaba sonriendo y unos chicos me dijeron ciao y es que pensaba en algo, hablaba conmigo misma, preguntándome muchas cosas, luego me paro y me digo...¡pero niña, si serás obsesiva! definitivamente soy una mujer con cierta tendencia a las obsesiones, pero comparándome con gente que conozco estoy todavía dentro de unos límites bastante saludables, no os preocupéis. Mi madre me diría mal de muchos, consuelo de tontos. sí que soy un poco tonta, porque me consuela. Mis obsesiones son sólo mías, pensamientos recurrentes, preguntas, un aferrarse a una idea, no me obsesiono con las personas. ¡Sí, eso es lo bueno! uff menos mal...
Y pensando en mí, no pude evitar relacionar ideas...y me vino a la cabeza mi mejor amiga M.M.M. hace poco me dijo que pensaba mucho en él, (un chico que ha conocido hace poco) en donde vivirían, con quién, cómo, lo que harían, (no sé por qué me la estoy imaginando pisando uvas) en fin, tantas cosas...yo le dije que tenía mucho de Lizzy Bennet y es que Lizzy se dió cuenta de que estaba enamorada del señor Darcy el día que conoció Pimberley. Creo que la mayoría de las chicas somos un poco como Lizzy Bennet, no es nuestra culpa, es evolutivo...aunque M. me dijo se sentía más como María von Trapp (por las niñas de las que no es madre y los paisajes extensos...).
Nuestra forma de ser obsesas es parecida. No es la del tipo enfermizo que quede claro.
Le gusta soñar despierta y este chico no iba a ser la excepción, pero lo que más gracia me hizo entonces fue lo que me dijo: pero sólo voy a soñar hasta mediados de abril, luego ya me quitaré todas estas ideas de la cabeza, sí, creo que esa fue su fecha límite. Entonces me pareció una ocurrencia divertida, pero bastante más me lo ha parecido hoy cuando pasé de una idea a otra pensando en obsesiones y recordé nuestra conversación de hace unas semanas sin querer y por casualidad.

¿Por qué pintar el velo?

Voy a divagar un poco sobre por qué la película "El velo pintado" se llama como se llama. Quizás, porque al principio el corazón no podía ver por el velo de colores que tenían delante...
El está apasionado, ella se casa casi por oblibación. Llevan una vida más bien aburrida, él pasa los días estudiando y trabajando, ella se siente vacía, presa y vendida como una esclava.
Sus vidas no parecen vidas de verdad, viven su ser a medias, su naturaleza se conforma. Él quiere dar más, pero de cierta forma no se atreve, muy dentro de él sabe que el corazón de ella no le pertenece, pero no le importa.
Le falta ímpetu. Su orgullo y carácter salen a la luz sólo con la adversidad (por lo que ella le hace) y esto es precisamente lo que hace que ella se enamore (más adelante).
Ella ansía pasión, alguien que la entienda, parece encontrar comprensión en su amante, muy pronto se daría cuenta de que a éste su esencia le interesaba bastante poco.
El viaje a ese lugar remoto, triste, peligroso, distinto, solitario los acerca, ella se da cuenta de cuánto le importa, aprende a admirar su trabajo y dedicación, lo ve por primera vez, descubre su pasión. Él empieza a ver una parte de ella que desconocía, y su amor se va haciendo más profundo. A pesar de lo ocurrido y quzás por eso, las circunstancias hacen que las estrellas se conjuren, que brote algo que estaba dormido. Un sentimiento intenso que requería el desprecio y la indiferencia para poder comenzar a existir. Ella, por otra parte, se enamora profundamente por primera vez.
El velo pintado... al final... se vuelve transparente, así era el amor que al principio no les unía, invisble, incoloro...(acabo al revés de como empiezo) uhmmm...pero luego va adquiriendo, como el cuadro más bello, colores que lo hacen digno, trascendental.
¿Por qué un velo? porque representa el matrimonio...el velo de la novia que debiera ser blanco y no colorido. Será eso, simplemente es algo distinto, un amor que empieza cuando está acabando.

En el País de las maravillas

Hoy he salido un rato, moverse por el centro era casi imposible, me incomodaba sobremanera la aglomeración tremenda de gente que había, así que elegí calles laterales para llegar hasta el río. Cuando salí de casa aún no habían demasiado borrachos por la calle, bueno, la verdad es que aún era temprano, serían las dos de la tarde. Pasé por el Butlers, me compré mi chocolate y fui dirección Savoy.
Compré una entrada para Alicia en el Pais de las maravillas, el cine estaba bastante lleno para la hora que era. La peli me gustó, Johnny Depp está estupendo, la chica que hace de Alice me ha convencido, una pena que no me enterase de todo...
Antes de que empezara la película temí un escándalo como el de la última vez que fui al cine, aquí la gente no sabe estarse callada dentro. Nisiquiera las señoras mayores. Cada vez que voy al cine tengo miedo de que alguien me estropée el momento con algún tipo de comportamiento lamentable. Hoy, menos mal, no pasó nada, aunque nada más sentarme en la butaca tuve la certeza de que alguna interrupción iba a haber. Me alegro de que mis certezas se equivoquen.
Al salir, aparte de algunos borrachos gritando, los pubs llenos de gente y muchos raros caminado por la calle, el camino de vuelta fue agradable.
Me llamaron, pero no cogí el teléfono o... ¿es que no lo oí? ya no me acuerdo.

Oliendo el sueño

Murmura la noche y me dice al oído que, quizás, debiera hacer un esfuerzo y salir de casa, también me dice que estoy cansada y que para salir con gente que me da más bien igual, mejor me quedo viendo "Conoces a Joe Black", película que encanta a mi madre y que por fin voy a ponerme; claro que dudo... lo típico en estas circusntancias ¿me estaré perdiendo algo bueno? ¿hago mejor quedándome que saliendo?
¡Cómo me gustaría tener un círculo interesante de conocidos! Pero la humanidad afín escasea, cada vez más y algunos afines se alejan sin razón o, porque la afinidad no es recíproca, algo que no puedes explicarte, porque para ti está allí, sin embargo no es correspondida. Sino no estaría escribiendo justo estas líneas y precisamente ahora.
La idea de arreglarme e ir a tomar algo me tienta, charlar con gente, interactuar un poco. La soledad aunque deseada, puede ser mala compañera. Hay que alternar los momentos, sino corremos el riesgo de volvernos ermitaños, pero siempre es más fácil quedarse y eso es lo que haré, a no ser que... aún suceda algo, nunca se sabe, pero mucho me temo que estoy oliendo el sueño y... huele rico.

Aislada en la isla con un chocolate, por suerte...

Atrapada estoy hasta no sé cuándo. No me quieren dar vaciones...
¡Qué horror! Mañana lo intentaré otra vez.
Hoy ha sido un día sin grandes altibajos, todo muy normal, bastante sosín y sin mucho estrés, mejor así. Y...pasado mañana es festivo, algo por lo que alegrarse. El gran momento del día ha sido, cuando de camino de vuelta, he pasado por Butlers y me he comprado mi chocolate caliente, consuelo de días tristes y portador de unos minutos de felicidad. ¡Qué haría sin él! Dulce y buen chocolate. Mañana también toca...hay que celebrar con trocitos de cacao que el miércoles no se trabaja. Uhmmm cómo me gusta saborear los últimos sorbos, la dulzura del fondo. El dulce, el río y las luces del atardecer me sirven de inspiración para recuperar el buen humor.

Una letra dorada

Me urge escribir, estoy muy tensa, estoy viendo La letra escarlata, una película de hace quince años, con una Demmi Moore jovencita y un Gary Oldman tremendamente bello (nunca lo había visto tan bello, ni en Drácula)... y genial, como siempre.
Una historia de amor en el nuevo mundo, cuando aún se ahorcaba a las mujeres por adulterio y por brujas o por cualquier cosa...¿a los hombres también se les ahorcaría por adulterio? no lo tengo muy claro y mucho me temo...mi sentido común está constestándome la pregunta mientras la formulo...que no, a ellos no los ahorcaban.
Llega sola (su marido anda no sé por dónde, llegará después) y conoce al pastor Arthur (Gary Oldman) es amor a primera vista, amor del alma y del cuerpo. La película es, al principio, de un romanticismo sublime, de lo mejorcito, pero luego se transforma en tensión, ¿los pillarán? ¿los ahorcarán?... sufrimiento, porque están separados y hay gente estúpida vigilando y torturándolos sólo con el mero hecho de exisitr. Porque conciencia no tienen. Su mente es esclava de la simplicidad más infinita.
Es terriblemente doloroso que no puedan verse, que él no pueda ver a su hija, que empiece a dudar de su propio amor, porque la culpabilidad lo está cegando. No quiero contar toda la película, así que aquí paro.
Bueno, ayer...al fin... llegó el día en el cual me pedí un whiskey con hielo en un bar. Jameson on the rocks, lo disfruté un montón, en invierno pasa mejor que la cerveza, es una buena alternativa cuando no quieres andar con tu copita de vino por la vida.
¡Qué fin de semana más intenso! Una letra escarlata con mi primer Whiskey on the rocks.
Se me olvidaba...¡Qué sobrecogedoramente apuesto y adorable está Gary Oldman en esta película! Aahhhh...

Escrutando un despertar

Hoy es otra vez sábado y una sensación conocida ha vuelto a acompañarme al despertar. Llevo varias semanas tratando de encontrar el problema para tratar de solucionarlo, sabía que era soledad, sabía que tenía que ver con el hecho de que al ser fin de semana y - aunque por una parte lo espero con ansias de lunes a jueves ya que disfruto mucho poder dormir unas horas más y porque puedo desconectar del estrés del día a día - siento, cuando abro los ojos y hablando literalmente, una angustia profunda en el pecho.
Los sábados (y los domingos también) no le encuentro sentido alguno a estar aquí. Siento, sin remedio, que estoy en el lugar equivocado. Hoy me he dado cuenta de que es una nostalgia punzante, un echar de menos doloroso un bello cuadro de fin de semana. Los despertares con mi Sputnik, los desayunos, los paseos en bicicleta casi en todas las estaciones del año, las mañanas de sofá de pleno invierno...el caminar juntos por la ciudad, ver películas o series por la noche, obligarlo a ir al cine.
El otro día le comentaba a mi compañera de piso que sé estar sola, o, por lo menos, más que otras personas, y es verdad, pero a medias. Las circusntancias recientemente me han enseñado que existe una nostalgia afilada, un echar de menos que no tiene nada que ver con una calentura exaltada, sino con las escenas vitales y eternas con tu compañero de viaje. Una vida anterior muy dulce en el recuerdo, que antes no podías echar de menos, porque estabas plenamente dentro. ¡Ahh bello cuadro!! A veces me pregunto si no debería entrar otra vez. Estar fuera era necesario para darse cuenta.

Veinte años no es nada

"Sentir
que es un soplo la vida
que veinte años no es nada"
El tiempo de los adultos es muy corto. Sí, el transcurso de nuestra vida se divide en 18 años de niñez y unos 50 de adultez (más o menos... según, los genes, la suerte y otros factores desconocidos), pero en nuestra mente y percepción esos primeros 18 años han durado mucho más que los otros 50. Yo aún estoy a una distancia relativamente lejana de los 50, pero imagino que deber ser así. Ya que hace nada tenía 20 y ahora...
¿Cómo hacer para afrontar estoicamente el paso de los años? Hay quienes pensarán, pero qué es lo que está diciendo esta chica, porque ellos no sienten que están afrontando nada, simplemente lo aceptan como es ¿quiénes lo consiguen? ¿y por qué a otros les jode tanto no ser más unos jovenzuelos? tendrá que ver con algo que pensamos no haber experimentado, por vivencias que se nos han escapado, algo que perdimos en el camino y no sabemos cómo recuperarlo, porque nisiquiera sabemos bien lo que es...o es que simplemente el paso del tiempo en nuestra mente no va en aboluto de acuerdo con el paso del tiempo real. En algún lugar nos quedamos atascascados, yo por lo menos lo estoy, y aún sigo esperando con paciencia el día en el cual pueda desatascarme.
Y es que la tragedia de ser viejo es que aún seguimos siendo jóvenes. Lo dice mi querido Oscar Wilde.

¿Optimismo por suerte?

Lo dicho, hoy de madrugada, faltando unas dos horas para levantarme, o sea sobre las 4.45 am... tenía una sensación extraña, una especie de desgana profunda y triste. No me apetecía en absoluto ir a trabajar. Cuando sonó el despertador permanecí echada cinco minutos más, combatiéndome; luego y a pesar del frío y la desidia, me levanté. Salí de casa, el aire y el sol me infundieron nuevos ánimos, me recordaron mis propósitos del día anterior, me recordaron además que la vida es luz y que el trabajo es sólo trabajo. Decidí encarar con buen humor la jornada laboral y ahora...recapitulando... puedo decir que ha sido un día bastante agradable, puede que mi optimismo atrajera la suerte, o que la suerte haya actuado por ella misma o...también puede que haya sido un poco de esto y un poco de aquello.
...Si siempre pudiéramos tomar las riendas de los ánimos...de los impulsos, todo sería más fácil, pero hablar consigo mismo, examinarse e intentar cambiar un poco las cosas sí ayuda, aunque en determinado momento nos parezca imposible. Si tus ánimos están de tu parte y no en contra, eso también hay que decirlo.
La voluntad, a veces, se esconde y hay que buscarla con lupa.
Empezar algo distinto después de haber estado demasiado bien acostumbrado es muy difícil, pero para descartar algo definitivamente, primero hay que probarlo cierto tiempo.
Y las lecciones aprendidas (aunque sea a base de dolor, de hecho cuanto más dolorosas más valiosas...) son un tesoro invaluable. Sonríamos para que el dolor sea pasajero y triunfe nuestro espíritu alegre.

Impaciencia

Hoy he pensado mucho en el estrés, en las decisiones correctas, en el valor, la confianza en uno mismo. A veces, cuando las cosas no funcionan demasiado bien, se requiere una autoconfianza muy sólida para seguir adelante y no hundirse.
Hace poco empecé a trabajar en una nueva empresa, llevo varias semanas aprendiendo lo que hay que aprender y hoy llegó el momento de la verdad. Nadie que esté siempre a tu lado y a quien puedas preguntar cualquier duda, vergüenza por estar preguntando si es que encontrabas a alguien cerca, quizás hasta una estupidez, estrés infinito por no poder dar la información de forma rápida y eficiente al cliente. La desesperación se apodera de mí. Intento tranquilizarme de mil maneras, mi vida no depende de ello, la vida es corta como para sentirse tan alicaído por algo tan poco importante, pero es que no quiero defraudarme a mí misma. Nadie nació sabiendo y la práctica hace al maestro, lo sé, lo sé, pero me falta la paciencia y sin paciencia es difícil.
En el camino de vuelta (haciendo nada más que pensar en el autobús) y después de llorar la desilusión... me fui reponiendo, recuperando la ilusión sin más lágrimas desilusionadas (por hoy), mañana será otro día, limpio de errores y mañana me daré ánimos a mí misma, más de los que me he dado hoy, mañana lo haré mejor.

Vivaldi pellizca el alma

El pasado 4 de marzo fue el cumpleaños de Antonio Lucio Vivaldi. Ese hombre que compuso las melodías más hermosas que existen. Me gustaría poder leer una buena biografía suya, lo que he encontrado en internet sobre él no descubre al hombre que nos regaló El Invierno. En general, Las Cuatro Estaciones son un momento de gloria dentro de una vida más bien llana. Es como si al escucharlas sintiésemos que hay algo...algo que debemos descubrir urgentemente, con locura, algo que grita, algo que quiere huir, algo que quiere ser, pero con los últimos acordes, nos damos cuenta de que no llegamos, de que es la música, la que nos está haciendo grandes, la que nos está ensalzando el pecho, pero nosotros queremos sentirmos durante mucho más tiempo grandes...por eso la ponemos una y otra vez, queremos ser ese verso de ese gran drama que es la vida...sí, que ella no pase sin nosotros, corremos detrás, porque se nos escapa, y tiene tanta fuerza y es tan bella, tan veloz... quisiéramos retenerla siempre, y cuando suenan todos los violines nos damos cuenta de que no hay alternativa, ella se va a ir y nos vamos a quedar muy solos. Solos esos que, a veces, la insultan: llana.

Howl y una resaca

Este fin de semana ha sido bastante fructífero en cierto aspecto. He visto tres películas, una de ellas se ha convertido en una gran favorita: El castillo ambulante de Howl. Es una película de Hayao Miyazaki. Hasta hace unas semanas no relacionaba este nombre con El viaje de Chihiro, La princesa Mononoke y El castillo ambulante de Howl, aunque, en su día viera, que anunciaban estas pelis en el cine, o las había oído mentar en algún sitio. Por casualidades de la vida, empecé a informarme y a averiguar, y por casualidades de la vida también, mi ignorancia es ahora un poquito menos inmensa.
Resulta que este señor es un genio aclamado y con un montón de seguidores. El castillo ambulante de Howl es poética, divertida, profunda y romántica. Que toca temas que, por lo menos a mí, me subyugan, tales como: la vejez, la belleza, el egoísmo, la muerte, la amistad, el perdón, el arrepentimiento y la entrega. Todo en un ambiente mágico donde la realidad se mezcla con la ficción en una armonía perfecta. Los persojajes son cada uno más adorable que el otro y no exagero si digo que si miráis con atención, os cautivará. Todavía me quedan muchas por ver, pero sé que sé de antemano que esta será mi favorita.
Acabo de terminar de ver Resacón en las Vegas, si estáis de bajón, os la recomiendo. Es muy divertida y levanta el ánimo, pero los habitantes del castillo de Howl también os proporcionarán alegrías. La vida es mágica aunque, a veces, no lo parezca.

Algo empieza

Acabo de decidir crear este blog, la idea se me había pasado antes por la cabeza, pero nunca encontraba el tiempo para ello. Ahora, la coyuntura existencial por la que estoy atravesando hace posible que encuentre el tiempo y la voluntad para escribir y compartir trozos de vida.
Espero que os guste. ¡Nos estamos viendo!